10 enero 2011

El que sabe, sabe. El que no...

Fui con amigas a un bar de San Telmo. Comimos y tomamos como en un banquete romano. Nos reímos, discutimos, y para variar me hicieron darme cuenta de que hago mal mi trabajo por el simple hecho de  que yo creía que se trataba de otra cosa. Vale aclarar que mis amigas trabajan conmigo.
Yo: El problema es que vos le decís a un tipo que no, porque no aplica, porque la garantía no lo cubre. Te pide con un supervisor, y le dicen a todo que sí con tal de no bancarse al cliente. 
Amiga Uno: Lo que pasa es que vos te calentás demasiado! Yo le digo esto es así y si no le gusta le paso con un supervisor y que  se arregle él. 
Amiga Dos: Claro!!! 
Yo: Pero boluda, si vos no tenés un comprobante, en ningún lado te validan una garantía! Si yo me compro un LDC y al segundo día no prende...no hice nada pero no prende. Y si yo tiré lea factura a la mierda cuando llamo a la garantía me dicen que lo sienten pero que me joda. 
Uno: Bueno pero podemos buscar la cuenta nosotros... lo que pasa es que si lo compro hace 20 años...
Yo: Y bueno boluda. Si te comprás algo que tiene garantía de un año, mínimo, guardá la factura -no te digo el certificado de garantía- LA FACTURA por un año! Si tiene cincuenta años de garantía, guardala cincuenta años! 
Dos: Lo que pasa es que vos te enroscas, hay que pasarle la llamada a un supervisor y él se lo arregla. 
Yo: Entonces para qué mierda le tengo que explicar lo de la garantía? A cualquier zapato que llame la cambio todo y listo! Si no lo hago yo lo hace un supervisor, y cuando de verdad necesito que un supervisor me arregle algo, está con un tipo que ni sabés si tiene garantía válida o si compró las cosas de segunda mano. Pero eso sí que lo arregla! 
Dos: Bueno, pasás la llamada y listo. Es tu trabajo.
Yo: Entonces para que me contrataron? Que hagan todo los supervisores y a mí me paguen sueldo de recepcionista. 
Uno: Pero Vale, no te enojés! No era para que te enojes! 
Yo: No boluda, no me enojo... pero me hubieras avisado antes.
Dos: Vos hacé tu trabajo. 
 Al rato se suma un amigo a la mesa. Pide un plato de papas fritas a la provenzal y una coca. 
Las papas fritas vinieron, la coca brillaba por su ausencia. Se la pedimos a una  moza, a otra, a un mozo (o eso creímos) y como nadie la trajo, pedimos la cuenta. Ahí sí, aparecía la Coca Cola fantasma. Amiga número dos, de la nada, saca un ataque de concha y le grita a la moza -"Me estás cobrando la Coca Cola que nunca me trajiste!!! Ya mismo me la borrás! 
La moza, con cara de poker, pidió disculpas y fué a la barra. Volvió para explicar que le habíamos pedido la coca al dueño del bar, que se había olvidado, y a otra moza que también se había olvidado, y que iban a sacar la coca de la cuenta. 
Ante esto, amiga número Dos, le soltó un rosario de puteadas, le dijo que su trabajo era darle la coca gratis, le dijo inútil, le dijo...lo que se te ocurra. Terminó con un categórico "Metete la coca en el culo!!!". Nosotros tres, calladitos, rezábamos para que nos tragase la tierra. Era un vasito de coca, a ocho mangos. Me compré una de dos litros y medio por la misma guita cuando salí del bar.
La moza se bancó las puteadas como una lady, me miró a mi (por algún motivo la piba ignoraba a mi amiga y me hablaba a mí) Y me dijo "ahora va a venir el dueño. Lo único que te pido es que lo traten como me trataron a mi." Cuando vino el dueño a traer el papelito de la tarjeta para que se lo firme, mi amiga se quedó como Gardel en el cuadro. No dijo ni "Mu". Y eso que la moza hizo "su trabajo" y le pasó con un superior... Al final me di cuenta de que sólo la chapa hace que los quejosos al pedo se callen la boca y que  la moza dió explicaciones al pedo, si nos hubiera atendido a todos el dueño, por más cagadas que se hubiese mandado, nadie hubiera dicho nada. Los únicos que pueden cometer errores son los jefes. Y se le perdonará lo que sea.

No debo olvidar: No volver a ese bar, porque me van a escupir la cerveza y me van a traer papas fritas con olor a culo. 

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Que mal loco, tu amiga se fue al mazo con el dueño. Y lo que mas bronca da que ella en su trabajo esta en la misma que la moza. no le hables mas!


firma
el regala deptos

Valeria dijo...

No sólo le hablo, sino que la banco. Soy la primera que se saca ante la presencia de un inútil... Así que no la puedo culpar por la reacción. El tema es que me jode que la gente se conforme con cualquier huevada siempre que venga de un jefe (y no lo digo sólo por mi amiga, lo digo por tooodos los salames que piden "hablar con el gerente" ¿Quiénes se creen que son???)Y tengo por norma no putear a quién me trae la comida, por razones obvias.

Noest dijo...

Yo también hubiese hecho lo mismo, es mas.. conociendome, capaz me quedaba callado y me cobraban de arriba la coca ausente jajaj.

Pero bueno, es lo que hay.. Parece q el "titulo" pesa y conforma jaja.