El domingo pasado mientras paseaba bajo la lluvia con un par de amigas, me llamó Vudú. Después de haber tenido la presión exageradamente alta unos días antes, el domingo le dió un ataque de vértigo y cuando fui a la casa y la vi, me pegué un susto madre. A penas si podía tenerse parada. Me abrió la puerta, me tiró las llaves y me dijo "Cerrá vos que yo no puedo." Dando tumbos se metió a la cama y me pidió que llamara una ambulancia porque creía que no iba a poder siquiera subirse a un auto. Llamé al 911. Me atiende un chico muy correcto, que a pesar de mi cagazo y de lo mal que le expliqué la situación mandó una ambulancia para que llegara a la brevedad. Antes que la ambulancia llegó un patrullero con dos policías que se dedicaron a pedirme mis datos y los de Vudú y como me vieron tan cagada en las patas trataron de calmarme un poco con el tema de que ya les habían avisado que la ambulancia estaba llegando.
Llegó la esperada ambulancia, bastante rápido pero no tanto como me hubiese gustado. No es que me esté quejando de la velocidad, es que tenía miedo de que mi amiga se desmayara, se pusiera peor o pasara cualquiera de todas esas cosas que no tengo idea cómo se manejan.
Llegó la esperada ambulancia, bastante rápido pero no tanto como me hubiese gustado. No es que me esté quejando de la velocidad, es que tenía miedo de que mi amiga se desmayara, se pusiera peor o pasara cualquiera de todas esas cosas que no tengo idea cómo se manejan.
Entran por la puerta un señor alto con cara de Sheldon Cooper, y una señora petisa con cara de pocos amigos. El primer comentario de la señora fue "¡¿¡¿¡¿Para qué me dijeron que estaban en la vía pública?!?!?!" Mi pensamiento fue "¿Qué carajo te importa? ¿Qué carajo ME importa? Atendé a esa piba." En un esfuerzo sobre humano, no dije nada. La señora nota que arriba de la mesa hay un envase de cerveza vacío. "¿Y esa cerveza quién se la tomó?" -"Yo, anoche"- dice mi amiga con un hilo de voz desde la habitación. -" Ah bueno se ponen en pedo y me llaman a mi" Magicamente, volví a callarme la boca. "¿Y dónde está la borracha?" Pregunta la señora sin imaginar el peligro que corría su vida mientras me imaginaba mil maneras de romperle la botella en la cabeza ante tal falta de profesionalismo. Le digo que suba, que está en el dormitorio. Subió y desde arriba gritaba. -"Tiene taquicardia y tiembla. Seguro que está re drogada y me hacen venir por ésto. Encima tenés Galeno. ¿Para qué mierda me llamaste a mí? " Baja y les dice a los policías: "Buéh no sé. Está ahí arriba y yo no la puedo bajar así que al hospital no la puedo llevar."
Y ahí hablé: "Escuchame. Desde que entraste estás con una cara de ojete que no te soportás ni vos. No te llamó ella. Te llamé yo. Porque supuse que lo correcto era llamar al 911. Y no te llamé por una resaca, yo anoche me tomé 6 cervezas y no estoy así. Ahora si me decís que tengo que llamar a Galeno. Andate y llamo a Galeno. No has hecho más que tratarla de borracha y drogadicta. Así estuviera borracha y drogada hasta la médula, es tu responsabilidad atenderla. Pero si no querés con gusto te dejo irte a tu casa."
La vieja bajó cuatro cambios, modificó la actitud de conchuda con la que había entrado y le pidió a los policías que ayudaran a mi amiga a bajar. Ella bajó apoyándose en todo, caminó hasta la ambulancia y la llevaron al hospital Argerich. Afuera de la sala de guardia escuchaba que la vieja le contaba a otra que andaba por ahí que había tenido que ir al pedo porque la piba se había tomado una cerveza y seguro que lo único que tenía era una curda jodida. Entra Sheldon y lo atajo con un "Decile a tu compañera que si no deja de chusmear idioteces inmediatamente va a tener que llamar ella a una ambulancia para que la junten con cucharita del piso y le hagan un ADN para reconocerla." La vieja no se volvió a oir, ni a ver. Se esfumó. En la misma sala de urgencias había una señora, sentada, a la que le estaban pasando suero. Y un señor, que hacía hora y media esperaba que le pasaran suero con calmantes porque no podía respirar del dolor que le causaban unos cálculos en la vesícula. Cada vez que nombraban a alguien el señor se paraba y preguntaba cuándo le tocaba a él. A mi amiga en 15 minutos le habían puesto suero. Me pidieron su tarjeta de Galeno y llamaron a la prepaga para que la fuera a buscar. Cuando Sheldon vino a devolveme la tarjeta le pregunté qué pasaba con el suero del señor. Mágicamente apareció el enfermero en menos de dos minutos. Mientras tanto las otras dos personas me contaban su historia. Cuando le pusieron el suero al señor empezó a mejorar y me contó que lo van a operar en 19 de julio porque no hay turnos para antes pero que ya no puede comer nada porque todo le causa dolores. A él le parece que para el 19 de julio ya va a estar muerto de hambre. Y mientras me lo contaba se reía resignado. La señora me contaba que al marido no lo habían dejado quedarse con ella. y que tenía que esperar ahí sola, lo que tardara en pasar el suero. Los dos solos ahí. Tratados como dos pedazos de mierda. Afuera se escuhaba "Che no hay ketorolac, qué le doy a éste?" "Qué se yo, fijate. Yo tengo tres más acá que tampoco queda lo que les tengo que dar" "Preguntale a la doctora" "Che éste no dá más y no hay médico disponible"
Asumo que la vieja con cara de orto gana mierda en cuotas, que todos los que estaban ahí, haciendo lo que podían para ayudar a los pacientes probablemente la pasen como el orto en el trabajo y sus sueldos sean un chiste. Supongo que es entendible que traten a la gente como la tratan. Todos somos vulnerables a la frustración.
Asumo que la vieja con cara de orto gana mierda en cuotas, que todos los que estaban ahí, haciendo lo que podían para ayudar a los pacientes probablemente la pasen como el orto en el trabajo y sus sueldos sean un chiste. Supongo que es entendible que traten a la gente como la tratan. Todos somos vulnerables a la frustración.
Debe ser terrible no tener prepaga u obra social y depender de un hospital que no tiene insumos, donde la gente que trabaja ahí hace lo que puede y como puede y se tiene que bancar a pelotudos como yo, que no tienen idea de lo que es la realidad que viven día a día. No es su culpa. Ni la mía. La próxima vez (que espero que no la haya) llamaré a Galeno, aunque sinceramente me gustaría poder decir "Terminé en la guardia de un hospital público y no sé de qué se quejan. Habrá mucha gente pero tienen equipamiento de primera y ya quisiera yo cobrar lo que cobran ellos" Pero lo más probable es que sigan con el tensiómetro sostenido por tela adhesiva y camillas destruídas. ¡Pero vamos! ¡Qué hay fútbol para todos!
3 comentarios:
Una mierda Vale... hacen lo q pueden.... igual a la mala onda... no tienen derecho... el que fue no les dije q trabajaran ahi o que estudiaran eso... o sea... estas ahi por eleccion... al menos tratame decentemente...
Y al final tu amiga q tenia??
Todavía estan viendo. La están estudiando como a rata de laboratorio... pero resaca no era! Igual ya está mucho mejor.
La señora es literalmente "UNA NEGRA DE MIERDA" gane $1000 o $6000 lo va a seguir siendo, yo los conozco por que vengo de un lugar donde esta lleno de gente así, y es pura elección propia de ser como son, se sienten re piolas y cancheros riéndose del que esta enfermo.Un horror.
Aline.
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