01 marzo 2011

V for Vergogna.

Hoy fue uno de esos días en los que quería desatornillarme la cabeza, dejarla por ahí y que duela sola. Me quería desatornillar el brazo y que me extirparan el hombro por un rato... hasta que dejara de doler.
Un rato antes de entrar a trabajar, me agarró uno de esos dolores que se asemejan a un codo puntiagudo presionando entre la columna vertebral y el homóplato, provocando un efecto "warp" en todo el trapecio que te hace sentir que nunca vas a tener la espalda normal en tu vida. El codito de gnomo hacía cada vez mas presión. Sentía que se me hundía el trapecio y me dolía desde la base de la cabeza, hasta la mitad de la columna.
Supliqué por un masajito. Mis compañeros, por turnos,  me amasaron un rato la espalda al compás del "Boluuuuuda qué huevo tenés acá!" Mi jefe me regaló un diclofenac que lamentablemente no me hizo o nada... o  no quiero saber lo que hubiese sido ese dolor sin esa pastillita...Me retiré antes del trabajo. Le estaba poniendo pilas pero se me caía un lagrimón cada vez que quería mover la cabeza. Me fuí al Sanatorio de la Trinidad Mitre. Me cago en la Trinidad, en el padre, el hijo y en la madre que lo parió.
El señor de seguridad para dejarme pasar me pide la credencial. ¿Y si no tengo? ¿Y si te quiero pagar la consulta, qué? ¿Me jodo? Le dí la credencial.
-"Por qué tema es?"
-"Se me está por quedar el cogote duro. Me duele como la... puedo pasar a la guardia?"
-"Mmmm sería la guardia de Traumatología. Debe ser contractura. Primer subsuelo, a  la izquierda, al fondo. Pasá."
- "Gracias doctor."  (Risas en el mostrador de entrada)
En la guardia clínica había un señorito jugando al solitario. Terminó el partido y me preguntó que me pasaba. -"Me duele acá, parpadeo y me duele... Me pueden atender o tengo que llamar el médico a casa?"
-"No, no. Dame la credencial. Firmá acá. Pasá por traumatología en 10 minutitos te atienden."
Y en ese momento uno empieza a soñar conque ya no le duele nada. A mi me pasa, al menos, que cuando ya sé que me están por atender se me empieza a pasar de a poquito. Muy poquito, pero me sentía algo mejor. Me acomodé en la sillitas de la sala de espera. No... no se me pasa un carajo... Ohm...Ohm.... No me duele, no me duele... viene el doctor y se me pasa Ohm.... No se me está pasando. Respiro hondo... olor a hospital... El olor a hospital todo lo cura Ohm.... Puta que lo parió no me sale el yoga...
Van 20 minutitos, ya viene el doctor, ya viene. Apoyo la cabeza en el hombro entonces se me va a relajar el musculito de mierda y me va a doler menos. Mierda que íncomoda es esta sillita. Mejor apoyo los codos en las rodillas y la cabeza en las manos... estiiiiro la espalda.... estiiiiro.... duele igual... Mierda qué suerte que no hay ni el gato en la sala de espera o se me estarían cagando de risa todos... No afloja... Carajo. A ver. Apoyo el brazo en el respaldo de la silla de al lado... recuesto suavemente la cabeza en el brazo... relajate, Vale, relajate... pasa.... sentí como se te afloja... No se afloja una mierda. La puta madre. ¿Qué hora es? Llevo 40 minutos esperando. No hay nadie acá. el doctor se debe estar cogiendo a una enfermera. Qué hijo de puta. Ahí viene una enfermera... Sí.. vaaaaamos que me lleva al consultorio me dan una pastillita mágica y no me duele más. Daaaaale.
-"El doctor va a tardar 10 minutitos más porque está con un paciente, ¿sabés?"
-"No, no sabía. Pero no me golpeé ni nada. Es una contractura. ¿No me podrá atender un clínico? La verdad es que me duele mucho la espalda y la estoy pasando mal en la silla."
Se acerca otra señora. - "Esperame un minutito querida que yo le voy a decir a la médica clínica que te atienda. No te pueden dejar así."
-"No es grave señora, si están ocupados espero un ratito, pero necesito que me den algo para que se me pase porque me estoy por poner a llorar del dolor." (Sí, ya sé. Re maricona... pero me dolía en serio.)
Después de una hora y diez minutos de esperar.... el brazo se me estaba durmiendo y me dió un poco de miedito, aparece el traumatólogo con cara de ojete porque lo saqué de la siesta. Me pone un dedo en el hombro (Mientras pienso - "Con lo que me hiciste esperar, por lo menos haceme masajes") Me dice que es una contractura. Me receta unas pastillas que textualmente "Te van a dejar medio boba" (más medio boba que ya soy... por cuatro días voy a estar hecha una pelotuda completa) y llama a la enfermera para que me pinche el culo con una substancia demasiado espesa como para no doler. La verdad una grande la enfermera. Me dolió lo mínimo indispensable.
Salí, me tomé un taxi y para cuando llegué a casa no me dolía NADA. Mágica la pichicata que me dieron. Pero me pongo a pensar... qué pasaba si yo acababa de pegarme un flor de palo? O si tenía algo jodido? O si no era sólo una maricona que no se banca una contractura... ¿Son adivinos? El doctorcito siestero no tenía idea de qué mierda tenía yo. Igual me dejó esperando más de una hora... de onda. Mientras me iba,  la enfermera me preguntó a nombre de quién hacía el certificado.
-"Qué certificado?" (Generalmente no te dan un puto certificado en la guardia de la Trinidad)
-"Para el trabajo...."
-"No necesito certificado, gracias."
-"Ah, no?"
Y ahí caí. Tanto vago se muda a la guardia para zafar de laburar, que cuándo algo te duele en serio, te hacen pagar el "día libre" con una larga espera.
Siempre es culpa de los vagos.

2 comentarios:

Alex dijo...

Espero que estés mejor de tu contractura...la próxima ahorrate la espera, tomate un miorrelajante y acostate...Aunque parezca increíble, y tal vez no sea el caso, a veces el médico realmente está con otro paciente y la cara de recién levantado de la siesta es en realidad cara de llevar 24 horas de guardia...lo que si es cierto es lo de los vagos que buscan certificados para zafar el día del laburo...tan cierto como que un certificado expedido por guardia no tiene valor mas allá del día de atención...

Valeria dijo...

El médico no estaba en el consultorio. Eran las 2 de la mañana y el diclofenac que me tomé no me hizo nada. Sé que no es fácil ser médico y hablo sólo desde mi punto de vista sin tener en cuenta al flaco que tal vez estaba laburando desde hacía 24 horas. La guardia era un desierto y de verdad creo que me querían hacer pagar el día libre. Por suerte ya pasó!